sábado, 16 de abril de 2011

El cuentito

Aquello que nos hace especiales, se convertirá en fuente de oportunidades, aunque a primera vista no lo parezca, porque sólo nosotros podremos aprovecharlas

Había una vez un cuento cortito, de aspecto chiquito, letras pequeñitas y pocas palabritas. Era tan poca cosa que apenas nadie reparaba en él, sintiéndose triste y olvidado. Llegó incluso a envidiar a los cuentos mayores, esos que siempre que había una oportunidad eran elegidos primero. Pero un día, un viejo y perezoso periodista encontró un huequito entre sus escritos, y buscando cómo llenarlo sólo encontró aquel cuentito. A regañadientes, lo incluyó entre sus palabras, y al día siguiente el cuentito se leyó en mil lugares. Era tan cortito, que siempre había tiempo para contarlo, y en sólo unos pocos días, el mundo entero conocía su historia. Una sencilla historia que hablaba de que da igual ser grande o pequeño, gordo o flaco, rápido o lento, porque precisamente de aquello que nos hace especiales surgirá nuestra gran oportunidad.

martes, 1 de marzo de 2011

Problemas con el control de esfinteres

En respuesta a la consulta apesar e tener pocos datos espero poder ayudarte....
Los niños son muy sensibles a cualquier desequilibrio
emocional No sé si hablas de un niño que presenta discapacidad intelectual o no
más muchos niños al no poder expresar con palabras lo que les pasa suelen
hacerlo así como cuentas…El padre y la madre deben coincidir en su manera de enseñar al niño el control de esfínteres, evitando tratar de controlarlo o aturdirlo y dando más importancia a sus avances que a sus escapes involuntarios y a sus retrocesos. Si no, el pequeño puede sentirse presionado y/o confundido y en estos casos es muy probable que opte aguantarse las ganas de hacer caca.


Pautas adecuadaS

Las siguientes pautas también sirven para solucionar el estreñimiento provocado por causas emocionales:
    Proporcionar  al niño un muñeco con un orinal. El pequeño transmitirá al muñeco la tensión que      él vive, mientras le “enseña” a hacer sus necesidades en el orinal del juguete.
  • Brindarle oportunidades para jugar con plastilina, barro, arena o pintura de
         dedos
    . Manosear estos materiales y embadurnarse con ellos le sirve
         para elaborar ciertas fantasías y miedos. Por ejemplo, las bolitas de
         barro representan para él sus propias heces y jugando con ellas se prepara
         para la verdadera situación.
  • Una dieta rica en fibra también le ayudará a defecar. Es importantísimo que beba
         mucha agua, que tome frutas y verduras en abundancia y que prescinda de
         los alimentos que estriñen (arroz, zanahorias...).
  • La  intervención del pediatra resulta fundamental para ayudar al pequeño a
         superar su problema. Durante una temporada le mandará laxantes o
         supositorios para que no le cueste tanto esfuerzo hacer caca
    (jamás
         debemos administrarle estos medicamentos por nuestra cuenta). Así, además,
         evitará la posibilidad de que se haga una fisura anal, lo que complicaría
         aún más las cosas (en este caso habría que aplicarle una pomada que
         favoreciera el cierre de la herida). Salvo casos muy especiales, los
         pequeños superan sus dificultades para hacer caca en algo menos de un m
 
    Puede ser por mied0

Algunos niños se resisten a hacer caca en el orinal porque al verla creen que están perdiendo
una parte de su cuerpo y por eso se niegan a repetir la acción. En este caso,
como se trata de un miedo, no hay que regañar ni ridiculizar al pequeño, porque
estas reacciones acentuarían su temor. Hay que ponerle el pañal para hacer caca
e ir colocándoselo cada vez más bajo, para que poco a poco aprenda a “soltar”.
Así llegará un momento en el que apenas habrá diferencia entre hacerlo en el
pañal y en el orinal, y se sentirá más cómodo empleando el recipiente que
poniéndose perdido.



sábado, 22 de enero de 2011

Eliminan centro de terapia para niños con necesidades especiales en la Perla

 
A pesar de su corta edad, a Joaquín Herrera, un niño de 6 años, alegre y cariñoso, le han cerrado muchas puertas. Siete centros de educación inicial lo rechazaron por sufrir retardo mixto del lenguaje, hiperactividad y problemas de aprendizaje.
Para superar estas dificultades, en paralelo al colegio, su madre Geraldine Herrera contaba con las terapias que impartía el Programa de Educación Especial Luisa Sologuren, situado en la cuadra 40 de la avenida La Marina, en La Perla, Callao .
En esta entidad, creada hace 26 años por el Ministerio de Educación, alrededor de 260 niños recibían terapia física y del lenguaje entre marzo y diciembre. Sin embargo, en octubre del 2010, la resolución 3127 de la Dirección Regional de Educación del Callao (DREC) eliminó el programa para crear en dicho local un Centro de Educación Básica Especial (CEBE).
Los CEBE reciben a estudiantes con retardo severo o multidiscapacidad con la finalidad de que desarrollen habilidades básicas como aprender a comer o a vestirse solos. En otras palabras, no ofrecen terapias para niños como Joaquín. Y es que, según la política inclusiva del Ministerio de Educación, los niños con discapacidad cognitiva leve o moderada deben ser matriculados en colegios regulares.
Esto significa, según explica Idel Vexler, viceministro de Gestión Pedagógica de dicho portafolio, que los niños con síndrome de Down, autismo o retardo mental leves deben ser incluidos.
“El Ministerio de Educación no brinda terapia, lo que brinda es educación especial. La terapia la brindan los hospitales”, afirmó el funcionario.
¿QUÉ OPCIONES TIENEN LOS NIÑOS DEL DESAPARECIDO PROGRAMA?
En el Callao, solo el Instituto Nacional de Rehabilitación Adriana Rebaza Flores y el hospital Daniel Alcides Carrión brindan terapias aunque la gran demanda no permite tratamientos continuos por más de dos meses.
La otra opción es contratar servicios particulares, pero estos tienen un elevado costo.
FALTA INFRAESTRUCTURA
Mientras tanto, el nuevo CEBE Luisa Sologuren iniciará clases el 1 de marzo pese a que, según su directora Haydeé Aróstegui, no cuentan con infraestructura adecuada para recibir a los 39 estudiantes inscritos hasta el momento. “Este local fue construido para dar terapias. Necesitamos una adecuación inmediata y más ambientes”, comentó.
Sumado a esto, el CEBE comparte su local con el Programa de Intervención Temprana en Educación Especial(Prite-Callao), que funciona en el segundo piso desde el 2008.
Este programa atiende a 91 niños menores de 5 años con discapacidad o alto riesgo de adquirirla. Su personal informó que se encuentran hacinados.
AL GRANO
No se debe cortar la terapia
¿Cuál es la política del Ministerio de Educación sobre niños con discapacidad cognitiva leve o moderada?
El ministerio ha normado que estos niños deben ser matriculados en colegios regulares. Pero no se puede quitar un servicio de apoyo a un niño de un momento a otro. La UGEL o la DREC del Callao deberían intervenir para que continúe la terapia de los niños del Sologuren.
¿Matricular es incluir?
No. El ingreso de un niño con estas características a un colegio regular debe ser coordinado con el Servicio de Apoyo y Asesoramiento para la Atención de Necesidades Especiales (Saanee), que funciona en cada CEBE.
 

La serpiente y la rana

EFECTO AMBIENTE CAMPO Y CROAR

NARRADOR Una ranita bebé saltaba por el campo, feliz de haber dejado de ser renacuajo. Al poco rato, se encontró con un ser muy raro que se arrastraba por el suelo.

RANA ¡Qué gusano tan largo y tan gordo!

NARRADOR Al principio, la ranita se asustó mucho, pues jamás en su corta vida terrestre había visto un animal así.

EFECTO SILBIDO SERPIENTE

NARRADOR Además, el ruido que hacía al meter y sacar la lengua de su boca era como para ponerle la piel de gallina a cualquier rana. Se trataba en verdad de un bicho raro, pero tenía los colores más hermosos que la ranita había visto jamás.

RANA ¡Qué lindo es!... Me acercaré y le hablaré… ¡Hola!... ¿Quién eres tú? ¡Qué haces arrastrándote por el suelo?

SERPIENTE Yo soy una serpiente bebé… Es que las serpientes caminamos así. ¿Quieres que te enseñe?

RANA ¡Sí, sí!... Enséñame, amiga serpiente.

NARRADOR La serpiente bebé le dio unas cuantas clases del secreto arte de arrastrarse por el suelo, cosa que ninguna rana había ensayado hasta entonces…

SERPIENTE ¿Ves?... Así, así…

NARRADOR Después de varios intentos fallidos en los que la rana bebé tragó tierra a montones, logró avanzar algunos metros imitando a la serpiente bebé…

RANA ¡Lo logré!... (RISAS)… Ahora, yo quiero enseñarte a saltar. ¿Te gustaría?

SERPIENTE ¡Claro, enséñame, por favor!

NARRADOR La ranita bebé le enseñó a la serpiente bebé el difícil arte caminar saltando, cosa que nunca había intentado ninguna serpiente.

SERPIENTE ¡Qué difícil!

RANA No, verás que puedes… Mira como hago yo…

NARRADOR Para la serpiente bebé fue tan difícil aprender a saltar como para la rana bebé aprender a arrastrarse por el piso. Pero, al fin, lo logró…

SERPIENTE ¡Lo conseguí!... ¡Aprendí a saltar como tú!

NARRADOR Las dos amigas pasaron toda la mañana jugando y divirtiéndose. Se hubieran quedado todo el día si sus respectivas panzas no hubieran empezado a crujir, recordándoles que era hora de comer.

RANA ¡Nos vemos mañana, amiga serpiente, a la misma hora!

SERPIENTE ¡Hasta mañana, amiga rana!

CONTROL MÚSICA ALEGRE DE TRANSICIÓN

RANA ¡Hola mamá, mira lo que aprendí a hacer!

NARRADOR La rana bebé comenzó a arrastrarse por el suelo, orgullosa de lo que había aprendido.

MADRE RANA (FURIOSA) ¿Quién te enseñó a hacer eso?

RANA (CON MIEDO) Una serpiente bebé de colores muy lindos que
conocí esta mañana.

MADRE RANA Óyeme bien. Te prohíbo terminantemente que te vuelvas a ver con ese animal, ¿entiendes?

RANA ¿Por qué, mamá?

MADRE RANA Porque las serpientes no nos gustan. Y punto. Son venenosas y malvadas. Además, nos tienen odio.

RANA (LLORANDO) Pero esa serpiente no me odia. Es mi amiga.

MADRE RANA No sabes lo que dices. Y deja ya de quejarte, ¿está bien?

NARRADOR La rana bebé no probó ni una sola de las deliciosas moscas que su mamá le tenía para el almuerzo. No tenía hambre. Sólo tristeza.

CONTROL MÚSICA TRISTE

NARRADOR Cuando la serpiente bebé llegó a su casa, ocurrió algo parecido…

SERPIENTE ¡Mira, mamá, mira lo que aprendí!

MADRE SERPIENTE ¿Quién te enseño a saltar de esa manera tan ridícula?

SERPIENTE Una rana bebé muy simpática que conocí esta mañana.

MADRE SERPIENTE ¡Las ranas y las serpientes no pueden andar juntas! ¡Qué vergüenza! ¡La próxima vez que te encuentres con esa rana, mátala y cómetela!

SERPIENTE ¿Por qué?

MADRE SERPIENTE Porque las serpientes siempre hemos matado y nos hemos comido a las ranas. Así ha sido y tiene que seguir siendo igual.

SERPIENTE (LLORANDO) Pero, mamá, ¿cómo voy a matar a mi amiga y luego comérmela?

CONTROL MÚSICA TRISTE

NARRADOR Al día siguiente, a la hora de la cita, la rana bebé y la serpiente bebé no se saludaron. Sentían una tristeza grande en su corazón, pero se quedaron alejadas una de otra, mirándose con desconfianza y recelo.

CONTROL MÚSICA SUGESTIVA

LOCUTOR Decía Albert Einstein: ¡Triste época la nuestra!... Es más fácil desintegrar un átomo que un prejuicio.

Ojalá que los prejuicios puedan ser eliminados en nuestra sociedad...todos somos diferentes y todos tenemos los mismos de4rechos

lunes, 17 de enero de 2011

CARTA A SUS PADRES DE UN NIÑO CON SINDROME DE DOWN

Mamá y Papá:
Hoy soy tu sorpresa y tu dolor, el hijo no soñado, ni siquiera imaginado.
Mientras crecía en tu vientre temía los sueños y proyectos que tejían para mí y que no podría realizar. Sin embargo, sí al mirarme pueden ver más allá del cuadro médico, encontrarán en mí toda la belleza que sus ojos me quieran dar, y la inteligencia que su confianza haga crecer en mí.
Puedo ser un milagro de todos los días, soy capaz de sentir, de entender, de ser… Pero los necesito a mi lado con la ternura de una sonrisa cada vez que mis manitas torpes se equivoquen, con la paciencia tierna de esperar mis tiempos más lentos, con la sabiduría de guiarme sin querer transformarme, con la protección de su respeto para que los demás me respeten como soy.
Con la alegría de disfrutar el simple hecho de amarnos y compartir nuestra vida, venciendo los prejuicios y desafiando las opiniones rígidas.
Mi cuerpo es chiquito pero está lleno de amor, y si me abrazan fuerte, muy fuerte, podré darles la razón y el valor de luchar, sólo les pido la oportunidad de crecer con amor.
Los amo

sábado, 20 de noviembre de 2010

El DISCRETO SONIDO DE LAS ALAS DE LOS ANGELES...

Recibimos este texto por email que compartimos aqui. Aunque no concordamos en algunas afirmaciones, nos permite reflexionar un poco

.

Texto de Rubem Alves

Víctor es un adolescente. Consiguió un empleo en el McDonald’s.En el McDonald’s trabajan adolescentes. Antes de iniciar su trabajo ellos son entrenados. Son entrenados, primero, a cuidar del espacio en que trabajan: el orden, la limpieza, los materiales - servilletas, cañitas, condimentos y salsas, bandejas. Es preciso no desperdiciar. Después, son entrenados para tratar con los clientes. Delicadeza. Atención. Simpatia. Sonrisas. Buena voluntad. Clientes no deben ser contrariados. Tienen que sentirse como en casa. Tienen que salir satisfechos. Si salen contrariados, no regresaran. Victor aprendió bien las lecciones: comenzó su trabajo. Mas luego el descobrió una cosa que no estaba de acuerdo con lo aprendido: los adolescentes que eran los clientes, no cuidaban de las cosas como ellos, los empleados, cuidaban. Tiraban las cañitas, más de lo necesario, solo para jugar. Usaban más servilletas do que las necesarias. Ponían las bandejas dentro de la basura. Allí Víctor no consiguió comportarse de acuerdo con las reglas. Solo él y sus compañeros de trabajo obedecían as reglas era necesario que los clientes obedeciesen las mismas reglas. Eso vale no solo para el McDonald’s como también para toda la vida social. Porque sonreír y ser delicado con los clientes que no respetaban las reglas de educación? Y quedó claro para todo el mundo, colegas y clientes, que Víctor no estaba siguiendo las lecciones... El jefe llamó a Víctor. Le recordó lo que le había sido enseñado. Víctor no se convenció. No cedió. Dijo de forma clara lo que estaba sintiendo, lo que él deseaba era coherencia. Aquella condescendencia sonriente y amigable era una mala política educativa. Era injusticia.

Los compañeros de trabajo sentían y pensaban lo mismo que el. Más eran más flexibles... No reclamaban. Se tragaban el comportamiento mal educado de los clientes-adolescentes con una sonrisa pre-escrita,. Y el jefe, sonriendo, acabo por dar la razón a Víctor. ¿Cual es la diferencia que había entre Victor y sus compañeros?



Víctor tiene síndrome de Down.



Edmar es un adolescente. Callado. Casi no habla. Consiguió un empleo como lavador de autos en una gasolinera. Empleo bueno para el porqué no es necesario hablar en cuanto se lava un carro. Más de repente, sin ninguna explicación, Edmar no quiso trabajar. Se quedaba quieto en un rincón sin dar explicaciones Edmar, como o Víctor, tienen síndrome de Down. La "Fundación Síndrome de Down", que había conseguido el empleo para Edmar, fie informada de lo que estaba aconteciendo. Qué tristeza! Un bien empleo - y parece que Edmar iba a dejar el empleo. El camino más fácil seria simplemente decir: "Pena. Fracasamos. No resulto. Personas con síndrome de Down son así..." Mas la encargada de la inclusión no aceptó esa solución. Tenía que haber una razón para el extraño comportamiento de Edmar. Y como el es callado y no explica las razones de lo que hace, ella resolvió hacer una cosa radical: empleo se como lavadora de carros, en el puesto donde Edmar trabajaba. E fue allí, al lado do Edmar, que ella descubrió la causa del problema Edmar odiaba el líquido negrito que se coloca en las llantas .Lo odiaba porque tal líquido se pegaba en la mano, no había forma de sacarlo, y la mano quedaba negra y fea. Edmar no gustaba que su mano quedase negra y fea. Todos los otros lavadores - sin síndrome de Down - sentían lo mismo que o Edmar sentía, en relación al líquido negro. También ellos no gustaban de ver sus manos negras y sucias. No gustaban mas no reclamaban. La solución? Despedir a Edmar? De ningún modo! La "lavadora investigó si existía otro líquido que produjera el mismo efecto que el líquido Descubrió. Había. E así Edmar volvió a realizar alegremente su trabajo com las manos blancas. Y, gracias a él, y el trabajo de la "lavadora", todos los otros pudieron tener manos limpias al o finalizar su jornada.

Esa es una sorprendente característica de aquellos que tienen síndrome de Down: no aceptan aquel que contraria su deseo y sus convicciones. Victor deseaba coherencia. No iba a tragarse el comportamiento no civilizado de alguien. Edmar quería tener sus manos limpias. No iria hacer una cosa que ensuciase sus manos